sábado, 31 de enero de 2009

Desamparo

Huges Merle (1823-1881)

Sola, tan sola estaba, tan yacente
en su propio vacío y orfandades
como si un látigo de hostilidades
restallara en su espalda, o el tridente

de futuro, pretérito y presente
de un dios airado alzara tempestades
y clavara en el alma realidades
que ni vivió ni soñará su mente.

Fue un día gris, y aunque ya estaba sola,
no previó el rizo enorme de la ola
del desamparo, abrazo de granito.

Tendió la mano recabando ayuda,
mas nadie la apresó; glacial o muda
fue la respuesta a su angustiado grito.


Francisco Álvarez Hidalgo


domingo, 18 de enero de 2009

Nociones de atuendo

Charles Courtney Curran (1861-1942)


Para que el paso de la nube
fuera leve como la lluvia,
estás hecha para las mañanas
y la soledad de tus cosas,
del amor en labores
de siembra
y resurrección.

Festejas los imperios del viento
como si de un telar pudieran
nacerte, multiplicadas serpentinas de arco iris.

Ofrendas, con hebras del corazón
la hondura de los pétalos,
un cuenco
de ternuras en tiempo de adagio recostado.
De arpegios
encaminas al respiro, sobre el tapiz de los verdes,
derramando bendiciones de lavanda
en los atardeceres sin luz.


Mª Antonia Maroto Urones


sábado, 10 de enero de 2009

Manos

José Sánchez Parrales


Qué espacio milagroso el de las manos:
aman tocan retienen presienten matan
siembran
abrazan edifican acarician valoran
miden cazan impiden
se desgastan
se cierran.

Aurelio González Ovies

sábado, 3 de enero de 2009

Mujer

George Owen Wynne Apperley (1884-1960)


Los surcos de tu rostro,
regados por tu llanto,
son huellas de cosecha
que ya fructificó.

Tu pelo del color de la luna,
y que ayer fue dorado,
sigue dando su luz.

Tus pies, otra hora ligeros,
se arrastran por el suelo
sin perder su compás.

Esas manos que tiemblan
y que habían sido firmes,
acarician igual.

¿Por qué entonces te rindes?

Camina, continúa adelante,
no nos niegues tu fuerza,
deja que nos miremos
en ese claro espejo
de tu mundo interior
.

Mª J. Guardado (Cani)