sábado, 28 de junio de 2008

“Canela”

Escuela francesa, desconozco autor.


La “Canela” es una amiga
perra que hallé por la calle,
sola en la noche del Valle
lo mismo que una mendiga.
Sus cariños me prodiga,
no sabe en mi honor qué hacer
y ahora llego a comprender
que son más agradecidos
¡hasta los perros perdidos
que el hombre y que la mujer!.


Alfonso Camín (1890-1982)

sábado, 21 de junio de 2008

Al oído

Frederic Soulacroix (1858-1933)


¡Cuéntame la historia que amargó tu vida,
cuéntame que embate del dolor sufriste,
que tu faz ha vuelto mustia y dolorida
y hace a tu mirada tan baga y tan triste!

Quiero que abandones tus exangües manos
en mis manos, ávidas de consolaciones,
y abramos las puertas de nuestros arcanos
para oír qué dicen nuestros corazones.

Las horas pasemos rimando esas hondas
semioscuridades de nuestros destinos,
mientras besa el viento tus guedejas blondas
y copien mis ojos tus ojos divinos.

Y al morir la tarde, cuando las pavesas
de la roja hoguera del sol contemplemos,
tal vez se confundan nuestras dos tristezas…
¡Quizás nos amemos…, quizás nos amemos…!


Ernesto Noboa Caamaño ( 1891-1927)


sábado, 14 de junio de 2008

¡Probe pollín!


Pasara toa la vida
nel fatigosu trabayu
d’andar corriendo caleyes,
tirando siempre del carru.
Pero, pa entós, yera vieyu,
taba tou él fechu un trapo,
sin fuelle pa rebuznar
nin fuerces pa dar un saltu.

Por non tener non tenía
nin tan siquiera remangu
pa llevantar les oreyes,
diendo con elles colgando.

Tamién podiera dicise,
de querer siguir cuntando,
que ya non yera capaz,
aunque quixera intentalo,
d’espantar a los moscones
que lo picaben cual diaños,
pola funesta razón
de non tener juerza en rabu.

Yera vieyu, queda dicho,
y polo mesmo y lo tanto,
cargaba enriba del llombu
lo que ye propiu del casu,
les llaceries qu’acompañen
al discurrir de los años.

Pa disgracia del pollín
esto non lo entendía l’amu,
que dispués de saca-y l’untu
non tuvo en cuenta´l trabayu
que-y prestase mientres yera
capaz a tirar del carru,
tratándolo de tal modo
que mialma yera un escarniu.

Un golpe tras d’otru golpe,
un palu tras d’otru palu,
pretendiendo de que’l burru,
que ya la taba palmando,
siguiera, como de mozu,
peles caleyes trotiando,
carretándo-y el maizu
y los troncos de ñarbasu.

Non siendo asina la cosa,
fartucu de machacalu
sin sacar partíu de él,
¡d’au diaños diba sacalu!
sin tener misericordia
matólu d’un estacazu.

Cuantos burros hai como ésti,
toi refiriéndome al amu,
que dispués d’aprovechase
del pollín cuando ta sanu,
mátenlu de cualquier modo
cuando non puede col carru.


Bernardo Guardado (1913-1982)


Nota: Si quereis conocer más sobre este poeta y su obra, podéis visitar la página que su hija Cani le tiene dedicada.

sábado, 7 de junio de 2008

Y bajo el río, ¿qué?

Frederick D. Ogden (1892-1948)

Y junto al río un árbol
y por el río un pez,
y sobre el río el cielo
y bajo el río, ¿qué?.

El zapato de un pobre,
la impaciencia del frío,
o quizás el esqueleto
de algún cariño mío.

Y río arriba el monte
y río abajo el pez;
a todo río el agua
y a medio río, ¿quién?.

Alguien que a medio río
se quisiera quedar.
Pero un río es un río.
Me está esperando el mar.

Manuel Benítez Carrasco (1922-1999)


domingo, 1 de junio de 2008

La desahuciada

Christian Krohg (1852-1925)


-Tus manos son dos lirios – le decía
cuando endulzar queriendo su amargura
de víctima incurable, le oprimía
sus luengas manos de marmórea albura.

-Tus ojos son violetas – le decía
cuando extinguir queriendo sus enojos
de niña enferma, en el azul del día
de sus ojos bañándose mis ojos.

-Es un clavel tu boca – le decía
cuando al verla tan triste, me bebía
de sus labios de púrpura la miel.

Una mañana la llevé a la fosa…
Y han nacido en la tierra en que reposa
dos lirios, dos violetas y un clavel.


Julio Flórez (1867-1923)