domingo, 9 de mayo de 2010

Canción al niño pobre

Bartolomé Esteban Murillo (1617-1682)


¡Ay, mi dolor pordiosero
tu voz y tu figura
me tienen robado el sueño!

Quiero cantar mi nana
al niño pobre y hambriento
que busca entre basuras
migajas de pan reseco.
Cantar quiero y canto
con los pulmones abiertos
para que entre despacio
aire puro y bien fresco.
Cantar quiero y canto
con las fuerzas que hoy puedo
a vosotros que tenéis
el corazón casi yerto.

¡Ay, mi dolor pordiosero!

Duérmete, mi triste niño,
con luz de tibios luceros
que los oídos del rico
están llenos de cemento.
Mientras tú padeces hambre
y tu destino es incierto
ellos tienen cada día
sus bolsillos más repletos.
¡Y dicen que hay equidad
y un buen dios justiciero!
pues que se deje de alturas
y baje a ras de suelo
y consuele para siempre
a mi niño pordiosero.

Quiero cantar muy fuerte
con las olas y los vientos
con las nubes pasajeras
con las flores de los huertos
con los jazmines nevados
con los rayos y los truenos
con las violetas del monte
a mi niño pordiosero,
aquel que tiene vacío
su corazón y su cuerpo.
Su corazón de amor
y su cuerpo de pan tierno.

¡Ay, mi dolor pordiosero
tu voz y tu figura
me tienen robado del sueño!


Miguel Correas (1947- )

13 comentarios:

Cani dijo...

Leo; es precioso, cuadro y poema, es duro y tierno como todo lo que contiene tanto fondo social.
Un abrazo

Amma Sinclética dijo...

Es triste y muy bello.

Marian dijo...

Si bien el cuadro tiene la estética de otros tiempos de miseria, la palabra hace universal y atemporal la triste realidad que sufren muchos... a veces no tan lejanos si no muy cerca de nosotros.
Un abrazo

Ligia dijo...

Linda poesía para este maravilloso cuadro de Murillo. Besos

unjubilado dijo...

Al igual que el cuadro, el poema es precioso, pero me han entristecido. Me han recordado las basuras de Brasil, de la India, de los niños alimentándose de lo que sacan de ellas.
Saludos

Trini Reina dijo...

Un poema que, a nuestro pesar, está de rabiosa actualidad. Siempre lo ha estado y lejos de apagarse, parece que se agranda.

Me encanta ese cuadro de Murillo.

Besos

fgiucich dijo...

Cuadro y poema en una conjunción perfecta. Abrazos.

Algaire dijo...

Cani – Me pareció estupendo que alguien cantara al niño pobre, hay demasiados en el mundo y es bueno que alguien los recuerde con un bello poema como hizo Miguel Correas, y de Murillo ¿qué decir? es un pintor que me encanta.

Mademoiselle de Maupin – Si, triste por lo que representa del sufrimiento de un niño y bello por lo bien expresado que está.

Marian – Totalmente de acuerdo, el cuadro representa al niño pobre de otra época y el poema nos recuerda que los niños pobres todavía existen en nuestro tiempo.

Ligia – A mi también me parecen una maravilla los dos.

Unjubilado – Desgraciadamente no hay que ir tan lejos para ver niños pobres, es triste que en estos tiempos todavía existan niños que pasen hambre y otras muchas necesidades.

TriniReina – El cuadro de Murillo quizás no es el mejor que pintó, pero creo que es el idóneo para acompañar a este poema.

Fgiucich – Opino lo mismo.

fgiucich dijo...

Leí tu comentario en Oloop y me llama la atención. Te pasa allí únicamente o en mis otros blogs, también? Abrazos.

clariana dijo...

Lo que siente y transmite el poeta es para hacerte estremecer el alma. Que los niños tengan que pasar ya tan pequeñitos por estas dolorosas experiencias es algo que la humanidad está tolerando con la complicidad de todos y que repercutirá indudablemente en la futura vida del niño, que es lo más injusto. Si luego de mayor acaba en la cárcel, nadie se va a compadecer de él pensando que sus circunstancias fueron muy desiguales. Es hermoso que hayas tocado el tema, tan delicadamente con esta bella poesía y este maravilloso cuadro. Gracias Algaire por aportarnos tanto. Un abrazo.

Algaire dijo...

Fgiucich – Como ya te dejé dicho en tu blog, sólo me pasa en ese blog.

Clariana – Tienes razón, cuando el niño sea mayor nadie se va a preocupar de si su infancia fue buena o mala. Es muy triste que haya niños que tengan que vivir unas vidas tan duras y difíciles.

Fuga dijo...

Es lamentable que pasen los años y los niños sigan siendo las víctimas, nada nuevo bajo el sol.
El poema me entristece pero el cuadro me encanta, llevo días dándole vueltas al tema de las sombras y me admira que Murillo las haya resuelto tan bien, el cuadro es un prodigio de luces y sombras, es perfecto para el poema.
Un abrazo.

Algaire dijo...

Fuga - Muy cierto que es una pena que a estas alturas todavía haya niños que sufran, los hay y muchos y no sólo sufren de hambre, no hay más que ver las noticias que surgen ultimamente.
:-) ¿Qué te pasa con las sombras?