domingo, 12 de junio de 2011

La rueca


Katherine D.M. Bywater


La virgen hilaba,
la dueña domía,
la rueca giraba
loca de alegría.

¡Cordero divino,
tus blancos vellones
no igualan al lino
de mis ilusiones!

Gira, rueca mía,
gira, gira al viento,
que se acerca el día
de mi casamiento.

Gira, que mañana
cuando al alba cante
la clara campana,
llegará mi amante.

Hila con cuidado
mi velo de nieve,
que vendrá el amado
que al altar me lleve.

Se acerca: le siento
cruzar la llanura,
me trae la ternura
de su voz el viento.

Gira, gira, gira,
gira, rueca loca,
mi amado suspira
por besar mi boca.

¡Cordero divino,
tus blancos vellones,
no igualan al lino
de mis ilusiones!

La niña cantaba,
la dueña dormía,
la luz se apagaba
y sólo se oía
la voz crepitante
de leña reseca
y el loco y constante
girar de la rueca.


Francisco Villaespesa (1877-1936)

10 comentarios:

Ligia dijo...

Me acordé de Penélope, tejiendo y tejiendo esperando por Ulises. Besos

Senior Citizen dijo...

Villaespesa fue un poeta muy relacionado con Granada, donde estudió y donde se estrenó su obra "El alcázar de las perlas" que se desarrolla en la Alhambra.

Algaire dijo...

Ligia - Pues esta por lo que se ve no sólo tejía si no que con prisas, ella también esperaba a su amado.

Senior Citizen - A pesar de ser de Almería creo que fue Granada quién le influyó más. Este es un verso suyo:

Con pereza oriental, en la colina dormita,
ebrio de sol, el Albaicín.


Su obra es muy extensa y su vida muy viajera.

fgiucich dijo...

Un poema lleno de vida y color, acompañado de una apropiada pintura. Abrazos.

Cani dijo...

¡Que maravilla! hacia mucho tiempo que no leia este poema y me he puesto a recitarselo a mi nieta, le encanto y yo termine emocionada.
Y,como acostumbras, la conjuncion; ¡perfecta!
Besos

Marian dijo...

Me gusta el ritmo del poema,ligero y concéntrico...como el tiempo que teje la rueca.
Un besín

rosa dijo...

Hermoso utensilio, lástima que ya no se fabriquen, ni se utilicen.

Trini Reina dijo...

La rueca girando con su música extrañamente festiva. La rueca girando, la virgen hilando y la dueña soñando.

Besos

unjubilado dijo...

Al igual que el cuadro, me ha encantado el poema y otra cosa muy importante, me ha recordado retazos de mi juventud en el pueblo de mi padre. Allí muchas mujeres mayores estaban dándole vueltas a la rueca para posteriormente poder hilar con los mejores vellones de sus corderos.
Saludos

Algaire dijo...

Fgiucich – Yo diría que por su musicalidad es un poema alegre y el cuadro le puede acompañar bien.

Cani – Lo encontré de casualidad repasando un viejo libro de poemas, con el tiempo se nos olvidan muchos de los leídos hace tiempo y hay que ir a su rescate.

Marian – Yo diría que es un poema sencillo pero que engancha por su ritmo.

Rosa – Ahora son piezas de museo, pero en sus tiempos eran muy importantes.

TriniReina – Así es, cuantos sueños habrán girado al lado de las ruecas.

Unjubilado – No hay dudad de que fueron unos instrumentos muy importantes y necesarios en una época aunque hoy estén relegados al olvido.