domingo, 21 de octubre de 2012

Poema breve 2626


Andrés Camilo Arenas


Sola en el duro banco de la plaza,
y tal vez desolada, te rodean
docenas de palomas que zurean
en la tarde otoñal. Cada una traza

su propia línea, círculo, revuelo,
que no ves, abstraída
en ese maremágnum de la vida, 
por donde vaga el alma en desconsuelo.

Dentro de ti llevas el mundo, y nada
cautiva tu mirada.



11 comentarios:

Trini Reina dijo...

El otoño que nos cautiva el alma y nos llueve de grises.
La soledad que hace estragos.

Me gusta la pintura y me encanta el poema

Besos

Senior Citizen dijo...

Decenas de palomas...

No en muchas plazas quedan ya tantas palomas, pues mantienen a raya la población por el daño que hacen a los monumentos, pero siempre nos quedará alguna por si una tarde de otoño nos ponemos melancólicas como en este poema.

Algaire dijo...

TriniReina - Hay momentos en los que vivimos tan hacia adentro que nada de lo que nos rodea nos saca de nuestros pensamientos.

Senior Citizen - :-) Aunque el poema diga "docenas de palomas" el pintor sólo puso cinco, no se si porque se cansó de pintar o porque no cabían más en el cuadro o porque ya habían pasado los que las mantienen a raya. Pero en poesía, la imaginación pone el resto.

alfonsotetuan dijo...

Hola, Algaire:
Después de una larga ausencia, por avería en mi PC,
vuelvo a saludarte y comentar, con mis palabras insulsas,
tus exposiciones de cuadros y poesías.

Respecto al cuadro, creo que el pintor, quiso plasmar la soledad y,
Con muy buen acierto, se valió de esa meditabunda Señora y,
Como no, las siempre-hambrientas palomas.

Un saludo.



Soledad



Envuelta en la soledad,
sin nadie que la socorra,
Se ha puesto a meditar
Mientras comen las palomas.


Vandy

Algaire dijo...

Alfonsotetuan - La soledad y el vivir hacia adentro, lo que le impide a esa mujer fijarse en las palomas que la rodean.

unjubilado dijo...

Me ha gustado el cuadro del pintor colombiano Andrés, pintado al óleo sobre lienzo y llamado "Alimentando las palomas". Ayer tarde mi madre se fijó en unas cuantas palomas que estaban sobre el césped de la residencia, me dijo "Que pena que no se las pueda dar de comer", nos acercamos un momento, pero volvió a llover y tuvimos que entrar para no mojarnos.

Senior Citizen dijo...

¡Vaya! Había leído mal y creía que eran decenas las palomas. Unas pocas menos....

unjubilado dijo...

Senior Citizen Si tu no lo hubieras dicho, ¿quién se hubiera enterado, que has cambiado una o por una e?

Algaire dijo...

Unjubilado - ¿En la residencia tampoco se les puede dar de comer? ¡Pobres palomas!.

Senior Citizen - :-) Que más da decenas que docenas, al final no caben en el cuadro.

Unjubilado – Tienes razón Jubi.

unjubilado dijo...

En la residencia hay un cartel bien gordo, que dice que está prohibido dar de comer a las palomas. Pero hay residentes que se saltan la prohibición, aunque mi madre es muy cumplidora. Por cierto antes estaban muy concentradas en la plaza del Pilar, en la actualidad están distribuidas por todo Zaragoza y nunca en la misma zona, me imagino que los halcones que han soltado por la ciudad y que les han puesto nidos tienen la culpa.

Algaire dijo...

Unjubilado - :-) Yo sería una de las que me saltaría la prohibición, ya me conoces.