domingo, 3 de abril de 2011

Explicaciones


Henri Gervex (1852-1929)


Ya te pedí perdón, ¿qué más deseas…?
¿Que me arrastre, que pene, que suplique…?
¿Que te llore mi error, que magnifique
lo que no llegó a ser aunque lo creas?

¿Qué debería hacer para que veas
que no hay razón real que justifique
no darme la ocasión a que te explique
que nada le entregué que no poseas?

Creíste lo peor, hiciste un mundo
de lo que fue menguar de pena el peso
a una amiga común que estaba triste.

Soy tuyo nada más, y a ella un segundo
de consuelo le di con aquél beso
que aquella tarde aciaga sorprendiste.

Si así no lo entendiste
y ha de vivir mi amor del tuyo preso,
quizás deba olvidar este regreso.


16 comentarios:

Marian dijo...

Leyendo el poema e imaginando la situación, que tan histriónicamente describe el cuadro, he pensado en esa frase tan socorrida para los guionistas de cine, en la que el “infiel” pillado en una situación embarazosa suele decir “esto no es lo que parece”. :o)
Feliz domingo

Trini Reina dijo...

En verdad el poema describe la escena a la perfección y la pintura la rubrica.

Los celos son dañinos y para quién no los padece, algo incomprensible.
Pero, en verdad alguien no los ha sufrido alguna vez?...

Besos

Ligia dijo...

Buenísimo, no has podido encontrar mejor imagen al poema tan bien "explicado". Abrazos

Hans Móller dijo...

Hola, Algaire, me interesa, de momento, este bloc que realizas. Por mi parte, acabo de dar por terminada una serie de 54 pinturas hechas a partir del poemario Descripción de la mentira, de Antonio Gamoneda. Pudiera ser que esto tuviera interés para ti también. Saludos

rosa dijo...

Muy bien combinados poema y cuadro. Como siempre.

Algaire dijo...

Marian - :-) En este caso el marido se empeña en decir que sólo le hizo un favor a una amiga, esa fue sólo su intención.

TriniReina – Yo diría que los celos tienen dos vertientes, una cuando son fundados y otra cuando no lo son, pero en ambos casos son muy dañinos para una relación.

Ligia – No creas, yo me sorprendí cuando encontré un cuadro tan a propósito para este poema para el que no me parecía fácil encontrar uno.

Hans Móller – Bienvenido a mi casa.
Me alegra que mi blog le resulte de interés. Pasaré por el suyo para conocer ese trabajo.

Rosa – Estoy contenta con el resultado.

Hans Móller dijo...

Encontrarás mis cuadros en
https://picasaweb.google.com/105738378261284166802/ProyectoDM?authkey=Gv1sRgCJaWncSE27aGTg#
Saludos

Algaire dijo...

Hans Móller - Gracias por dejar la dirección para que pueda conocer tus cuadros.

clariana dijo...

¡Hola Algaire!
El amor de pareja muchas veces se convierte en ésto, en querer a esa persona y pretender en exclusiva que te quiera.
Creo que situaciones como la que describe el poeta son posibles, pues somos humanos y tender la mano a alguien que sufre en un momento dado no creo que tenga nada que ver con la infidelidad.
Interesante el tema y el cuadro. Un beso.

unjubilado dijo...

Precioso poema y hermosa pintura que sugiere muchas cosas.
Saludos

fgiucich dijo...

Un poema genial y un cuadro estupendo. Abrazos.

Algaire dijo...

Clariana – El problema de los celos es my complejo ya que se pueden sentir celos con causa justificada o sin ella y en ambos casos no traen nada bueno.

Unjubilado – Si, cada uno lo interpreta a su manera, pero eso es lo bueno de la poesía.

Fgiucich – A mi me pareció que ambos hacían buena pareja.

Esperanza dijo...

Aunque las palabras fueran ciertas, los celos prenden una chispita indeseable que perdura y que en cualquier momento puede volver a salir... lamentablemente, "siempre quedará la duda".

Me ha gustado el poema, la realidad que desprende, y el cuadro le va que ni pintado.

Algaire dijo...

Esperanza – Lo primero decirte que me alegra tu vuelta por mi casa.
Los celos son la peor enfermedad que puede tener el amor de una pareja.

A.Dulac dijo...

Mi aplauso por la atinadísima conjunción pictórica y literaria.
Los celos son malos consejeros pero los que los provocan ...
Un biquiño de A.Dulac

Algaire dijo...

A.Dulac - Tengo que reconocer que encontrar ese cuadro fue toda una suerte porque no era tarea fácil.